El Pajaro Inmortal

(Nombre técnico: Dancing Sparrow. Nombre real: el intruso alado que decidí no matar… todavía.)

No vuela. Pero vibra, canta y agita las alas como si estuviera nervioso. Me parece adecuado.
Además, se activa con el toque de una pata —como debe ser todo lo que me rodea.

Tiene tres modos de aleteo, un canto bastante creíble (diría que gorrión con ansiedad leve) y una textura que da gusto morder. No está relleno de alpiste, pero se le puede meter catnip. Detalle elegante.

Se carga por USB, sin pilas absurdas, y la funda se puede cambiar. También incluye un gancho si quieres colgarlo y verlo sufrir desde lo alto. Opcional, pero recomendado.

Lo uso cuando quiero entrenar mi instinto cazador sin salir de casa.
También cuando quiero algo suave para apretar mientras finjo que no me interesa.